historia1El origen del corporativismo médico lo tenemos que buscar en los gremios y cofradías medievales, asociaciones libres que surgieron impulsadas por la Iglesia, como consecuencia del ejercicio de una actividad común en artes, oficios o práctica mercantil.

Las ramas sanitarias, integradas por médicos, cirujanos y boticarios se fueron asociando bajo la advocación de los santos médicos, especialmente de San Cosme y San Damián.

Estas asociaciones cumplían con sus deberes religiosos, defendían los intereses profesionales de sus miembros, luchaban contra el intrusismo y, ayudaban y socorrían a sus integrantes más necesitados. Por otra parte se encargaban de organizar y regular la actividad médica a nivel local o municipal.

historia2A finales de la Edad Media, en Castilla, se creó el “Protomedicato”, que estableció las primeras bases de una medicina estatal.

Las primeras referencias, en la provincia de Tarragona, de las Cofradías de los Santos Cosme y Damián, son de carácter puramente religioso, formadas por feligreses, sin distinción de profesión.

Los Cónsules y Veguers de la ciudad de Tarragona, concedieron la Cofradía de los Santos Cosme y Damián a los doctores en medicina, cirujanos y boticarios. Se reunían en la capilla del Corpus Christi del claustro de la Seo y allí ordenaban, trataban y disponían sus asuntos profesionales. También tuvieron cofradías en Reus, Tortosa y La Selva del Camp.

En todos los estatutos de las cofradías, se hacía constar la obligatoriedad que tenían los médicos, cirujanos y boticarios de pertenecer a la misma, para poder ejercer dentro de la ciudad, así como la de evitar el intrusismo dentro de su jurisdicción . Consecuencia de esta finalidad restrictiva, los ordenamientos incluían como debía regularse la incorporación de los profesionales, las certificaciones que debían poseer y las pruebas teóricas y prácticas a las que eran sometidos los candidatos.

La cofradía tarraconense en 1582, recibió del rey Felipe III el Privilegio de constituirse en Colegio de Médicos, Cirujanos y Boticarios. En enero de 1756 los priores del Colegio de Médicos, Cirujanos y Boticarios de Tarragona dieron carta al boticario Francisco Arnau y el cirugía Ignacio Jordán, para que los representaran ante los tribunales. Antes de 1760 los cirujanos de Cataluña estaban sometidos a la autoridad del “Real Protomedicato” que residía en Madrid. Este delegaba la autoridad a sus Tenientes y éstos, a subdelegados repartidos en cada una de las doce veguerías que había en el Principado.

Las cofradías, el Colegio, comienzan a perder prestigio en la segunda mitad del setecientos, con la llegada de la Ilustración, movimiento caracterizado por romper con muchos moldes del pasado en beneficio de la razón.

Pere Virgili (1699-1776) puso las bases para la unificación de la medicina y la cirugía, ciencias que hasta el momento estaban totalmente separadas.

historia3En 1799 se une de manera oficial la enseñanza de la medicina y la cirugía al fusionarse en el “Real Colegio de Medicina y Cirugía de San Carlos”, el “Real Estudio de Medicina Práctica” y “el Real Colegio de Cirugía de San Carlos “. Esta unión se hace definitiva al publicarse el 10 de diciembre 1828 el “Reglamento para la Organización del Real Colegio de Medicina y Cirugía” donde se establece que los médicos y cirujanos recibirán estudios comunes.

En 1843 el “Real Colegio” recibía el nombre de Facultad de Ciencias Médicas y en 1845 Facultad de Medicina.

Entre 1828 y 1889 hay varias tentativas de crear organizaciones a nivel de todo el Estado, pero fracasaron al poco tiempo de ser constituidas. Es a partir de 1889 que se empieza a hablar de colegiación médica en Cataluña.

En 1893 se funda el “Colegio Médico de Madrid” y seguidamente en 1894 el de Barcelona, ​​Salamanca, La Coruña, Alicante, Tortosa y Zaragoza.

El “Colegio de los Santos Cosme y Damián” de Tarragona se mantiene hasta principios de 1808, al desaparecer la organización sanitaria, ésta cayó en manos de la “Junta de Sanidad Provincial “, de las “Juntas de Sanidad Municipales” y de las diferentes asociaciones de facultativos.

En 1892 se funda el” Ateneo Médico Farmacéutico “, disuelto en 1896, al convertirse en el Colegio Libre Tarraconense, éste existió hasta que en 1898 se creó el “Colegio de Médicos Provincial”. Una vez publicada esta creación en el R.D. del 12 de abril de 1898, el Gobernador de la provincia convoca a siete profesionales médicos para que constituyan la primera Junta que ponga en marcha la colegiación en Tarragona. La junta de gobierno, de los colegios, en las provincias de segunda clase (en la que pertenecía Tarragona) debía estar formada por un presidente, un secretario, un contador, un tesorero y cinco vocales. El “Boletín de la Provincia de Tarragona”, con fecha 22 de octubre de 1898 publica la lista de los médicos que reúnen las condiciones para desarrollar cargos en la Junta de Gobierno. Esta lista volvería a ser publicada de forma definitiva a finales de noviembre, con un total de 136 profesionales.

Después de las elecciones, la Junta de Gobierno del Colegio quedó constituida por los profesionales:

  • Presidente: Sr. Antonio Rabadà Mayné,
  • Vocal 1º. D. Nolla Ramon Martí,
  • Vocal 2º. D. Pedro Aguilera Solsona
  • Vocal 3º. D. Eufemiano Queralt inglés,
  • Vocal 4º. D. Blas Andrés Royo,
  • Vocal 5º. D. Ramon Barceló Estivill,
  • Tesorero D. Ignacio Carbón Vallés,
  • Contador D. Juan Torres Mallafré
  • Secretario d. Ricardo de Vilallonga Velasco

historia4Una de las primeras decisiones fue encontrar un local donde instalarlo se. Se encontró en el 3er. piso del nº 31 de la Rambla de San Carlos. También se decidió el editar un boletín. A consecuencia del R.D. de abril de 1898, se creó un sello de 3 pesetas en papel de timbre que debería acompañar a toda certificación o documento que entregue el médico para que éstos tengan efecto legal.

El 31 de diciembre de 1899 el “Bol. Del Col. de Médicos” publica el primer estado de cuentas del Colegio. Los ingresos fueron de 806’68 pesetas; los gastos de 671’33 y el saldo favorable de 135’53.

La primera Asamblea de Colegios de médicos de España, se realizó en Madrid. La reunión tenía la misión de estudiar y gestionar:

  • la Ley de Sanidad;
  • la defensa inamovible de los médicos;
  • la defensa de la colegiación obligatoria;
  • la defensa de la reglamentación de las Asociaciones y Empresas médicas;
  • la Reglamentación interior de los Colegios de Médicos;
  • la conveniencia de un congreso deontológico médico;
  • las bases para establecer un Montepío;
  • la modificación de la ley tributaria de la clase médica;
  • las bases para establecer relaciones entre los Colegios de Médicos.

 

De 1898 a 1900 hubo varias tentativas para hacer cumplir el RD de 12 de abril de 1898 donde se especificaba la obligatoriedad de la colegiación, ante la imposibilidad de poder conseguirlo, en redactaron y aprobaron, el 3 de noviembre de 1900, unos nuevos “Estatutos para el régimen de los Colegios de Médicos “. En ellos había varias modificaciones respecto a los de abril de 1898. Lo más destacable era el artículo 1º. de las “Disposiciones Generales”, donde se reconocía el derecho a constituir Colegios de Médicos en las poblaciones no capitales de provincia con más de 14.000 habitantes. Con esta disposición se aprobaron ese mismo año varias solicitudes, entre ellas la de Reus.

En junio de 1900, en el Colegio Provincial de Médicos de Tarragona se preocupa de formar las Juntas en sus distritos de Falset, Gandesa, Montblanc, Tortosa, Valls y El Vendrell.

En 1904 fueron reconocidos los Colegios, constituidos como “corporaciones oficiales”.

la obligatoriedad de colegiarse fue un tema que a pesar de la disposición ministerial de 1900 no quedó del todo resuelto hasta los estatutos de mayo de 1917.